Los primeros salesianos enviados a México llegaron a Veracruz el 1 de diciembre de 1892. Sin embargo, la obra salesiana ya había nacido en la capital mexicana más de tres años antes. A su llegada, los Hijos de Don Bosco recibieron una obra, por así decirlo, incipiente, pero vigorosa y llena de futuro. Este hecho es más único que común en la historia salesiana y merece ser explorado. Esta historia, que tiene lugar en México, no puede entenderse completamente sin tener en cuenta algunos conceptos sobre el país: historia, geografía… datos sociopolíticos.